Neymar le dio un codazo a su adversario croata Luka Modric y no pasó nada, la FIFA no lo sancionó de oficio porque juega en el seleccionado brasileño «dueño» del Mundial, pero ¿es para tanto lo de Suárez?.
La prensa brasileña ayudada por «Dios Marketing» sacó partido de los millones de posteos a lo largo y ancho del mundo generado por un supuesto mordiscón del uruguayo Luis Suárez. Luego de todo, no se trató más que de una jugada sucia, tan sucia como el violento codazo de Neymar.
Es impresionante cómo, por una cuestión de «audiencia» la FIFA cede a las presiones y llevó a la horca al notable delantero uruguayo, pero como no es capaz de darle, como mínimo, un partido de sanción a Neymar por agredir a un adversario.
Suárez es noticia, es audiencia, es dinero, es ganancia.
@lostribuneros