QUITO, 26 de septiembre de 2025 – La Copa Sudamericana ya tiene su primer gran papelón fuera de la cancha, y no es culpa de los arbitrajes. Es culpa de la cuenta de Twitter (o X, o como se llame hoy) de Liga Deportiva Universitaria de Quito (LDU), que anoche se coronó campeón de la insensibilidad y la torpeza digital tras ganarle a São Paulo en el Morumbí.
El resultado, 1-0 para el equipo ecuatoriano en cuartos de final, era motivo de orgullo. El Morumbí es una cancha mítica y ganarle allí siempre es un logro. La felicidad era lógica. Lo que no fue lógica fue la brillante idea de festejar con la frase de la hinchada paulista: “Definitivamente el Morumbí sí te mata”, acompañada de la foto del marcador.
El Gol en Contra de la Decencia
Lo que en el fútbol de tablón es un cargada ingeniosa (apropiarse de la frase del rival), en este contexto se transformó en un monumental gol en contra de la decencia. ¿Por qué? Porque el 22 de agosto de 2024, en ese mismo césped, el defensor uruguayo Juan Izquierdo, de Nacional de Montevideo, sufrió una arritmia cardíaca en pleno partido y murió cinco días después.
Sí, el Morumbí «mató» a un futbolista. Y a los community managers de LDU les pareció gracioso usar la frase. Es la diferencia entre la chicana de cancha y la burla institucional que cruza la línea de lo morboso.
La reacción fue instantánea. No importó el 1-0 ni el pase a semifinales; el foco se puso en el posteo infame. Las críticas llovieron desde Brasil, Ecuador y, con toda la razón del mundo, desde Uruguay.
El Comunicado de Nacional: Un Cachetazo de Guante Blanco
El que puso los puntos sobre las íes fue el Club Nacional de Football, que tuvo que emitir un comunicado con una elegancia que contrastó brutalmente con la «viveza» de LDU. Los uruguayos no se anduvieron con rodeos: expresaron su «profundo rechazo» y señalaron que el mensaje «toca un tema muy doloroso» y «atenta contra los esfuerzos de erradicación de la violencia en el deporte».
¡Zas! Un cross directo al mentón de las comunicaciones institucionales. Nacional no solo recordó el dolor de la tragedia, sino que le dio una lección de civismo a LDU, que con su chiste de mal gusto demostró que a veces los clubes están más preocupados por la viralidad que por la sensibilidad.
Borrar, Pedir Disculpas y Quedar en Offside
Como siempre sucede cuando la c**a ya está hecha, LDU se vio obligado a eliminar la publicación. La reacción tardía es el manual del manejo de crisis: si la pifiás, borrá. Pero la captura de pantalla ya es eterna y el daño está hecho.
Lo más irónico es que solo en agosto de 2024, un jugador de LDU, Gian Franco Allala, había homenajeado a Izquierdo entrando a la cancha con una camiseta en su memoria. Esto demuestra que la estupidez y la falta de tacto a nivel institucional no siempre reflejan el respeto que sí existe en el vestuario.
LDU pasó de ser un héroe copero a un villano de las redes sociales en cuestión de minutos. El fútbol sudamericano necesita pasión, cargadas, rivalidad y picante, pero jamás a costa del dolor. Ganaron la batalla en el Morumbí, pero perdieron la guerra de la sensibilidad.
¿Fue solo una pifiada de un CM sin filtro o un reflejo de que el fútbol ya no respeta nada con tal de generar engagement?








