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Los aztecas no tuvieron problemas en la Repesca, ya que le marcaron 9 tantos a los «All Whites» en el global, y se ganaron el pasaje a Brasil 2014. México, la pasó muy mal en las Eliminatorias, clasificando gracias a una ayuda de un compatriota que juega por Estados Unidos.
Millones de mexicanos amantes del fútbol, volvieron a la vida, luego que el «Tri» se asegure su presencia en la Copa del Mundo 2014.
El equipo norteamericano venció en Wellington por 4-2 al local Nueva Zelanda, en una tarde espectacular de Oribe Peralta que se despachó con un triplete.
Los aztecas ganaron la serie con un global de 9-3.
35.000 se dieron a la cita en el Westpac Stadium de Wellington, para ver a su seleccionado ante México, por la revancha de la Repesca.
En tierras mexicanas la selección All White había caído por un histórico 5-1, pero pese a todo, el público los acompañó y en masa fueron al estadio.
En media hora el «Tri» tenía liquidada la serie; Oribe Peralta anotó a los 14′, 29′ y 33′, acabando el primer tiempo 0-3.
Los locales reaccionaron cerca del final, cuando a los 80′ de tiro penal James descontaba, y solo 3′ después, Fallon ponía las cosas 2-3, aunque el pescado ya estaba vendido.
El broche de oro fue puesto por Peña, que anotó el 2-4 a los 86′.
Esta clasificación fue sin duda un baño de humildad para un arrogante México, que jugó las Eliminatorias, creyéndose superior a sus adversario, terminando humillado y abucheado.
Un milagro los mandó a Brasil 2014, ya que un jugador de la selección de Estados Unidos, de origen mexicano marcó el gol que los devolvió a la vida, ya que a esta altura, estaban eliminados.
La televisión, medios de prensa, turismo y marketing, están más que agradecidos, ya que si quedaban eliminados, las pérdidas oscilaban los 600 millones de dólares.
@lostribuneros
