El argentino se convirtió en el máximo goleador de todos los tiempos del fútbol español, tras anotarle un triplete al Sevilla. Barcelona ganó por 5-1 y Messi alcanzó los 253 goles.
Por la jornada 12 de la Liga, la Pulga se hizo la panzada ante un rival más que mediocre; el Camp Nou pudo ser testigo de un récord anotado por su hijo pródigo.
Barcelona se hizo la panzada ante un Sevilla que, desde el minuto 1, se colgó del travesaño y apenas le faltó colocar el ómnibus frente a su valla.
Los catalanes, que jugaron un pésimo partido, sacaron provecho de los cracks que tienen en el ataque, por eso, que le propinaron una goleada al visitante.
Da pena la falta de entrega de este equipo, quien no opuso resistencia y que fue incapaz de anotar un gol, ya que Jordi Alba se encargó de anotar en contra.
Messi abrió a los 21′, el mencionado Jordi Alba puso el equilibrio a los 47′, apenas 2′ después, de cabeza Neymar puso el 2-1.
Sevilla bajó definitivamente la guardia y dejó al equipo catalán que haga lo que quiera; se atrincheraron frente a su área y de ahí no salían. Fue vergonzoso ver la falta de garra de sus atletas.
Luisito Suárez entró por la derecha y se la puso a Rakitic para que éste anote el 3-1 a los 65′.
Messi a los 72′ se encargó de poner el 4-1 y, con el permiso del referí, sus compañeros lo tomaron y lo tiraron al aire varias veces, conmemorando su récord absoluto. El rosarino había superado a Zarra.
Pero, ese doblete no conformó al mejor atacante de todos los tiempos del fútbol español, porque a los 78′ puso la lotería y su tercer gol en la brega.
@lostribuneros