Argentina jugó su primer Amistoso FIFA de este 2019 y lo hizo con el pie izquierdo. El equipo de Lionel Scaloni cayó por 3-1 en Madrid con Venezuela. Volvió Lionel Messi.
La Vinotinto le dio una lección a una indescifrable selección argentina en el Wanda Metropolitano de Madrid y preocupa de cara a la próxima Copa América de Brasil, que comenzará a mediados de junio.
Argentina, de la mano de Lionel Scaloni, volvió a la actividad firme y con proyección hacia la alta competición nueve meses después del fracaso de la Copa del Mundo de Rusia.
Con caras nuevas y apenas la del retornante «Leo» Messi el equipo del flamante entrenador Lionel Scaloni preocupó por demás por su falta de juego y por la facilidad con que una bien armada Venezuela le entró, especialmente en la primera parte, y que no goleó por causa de un presto Franco Armani y la falta de puntería de algunos de sus hábiles.
El planteamiento realizado por Scaloni, con cinco defensores, donde los dos laterales se acoplaban al ataque y generaban mucho peso en la faz ofensiva, y lo que sería un trabajo descomunal para los defensores vinotinto, terminó jugandoles en contra.
Venezuela, dirigida por el ex arquero Rafael Dudamel, se supo resguardar y encontró la manera de romper la defensa de tres con pelotazos cruzados. La Falta de balance defensivo dejó a los atacantes caribeños de cara con los defensores albicelestes y allí llegaron los goles de Salomón Rondón -ni bien arrancaron- Jhon Murillo antes del descanso y en el complemento de Josef Martínez. Para Argentina descontó Lautaro Martínez.
Flojo partido del «Pity» Martínez, y buen encuentro de un Messi que solo luchaba contra todos y que buscaba constantemente a sus compañeros, pero que no hubo entendimiento.
Juan Foyth fue el punto más flaco de la selección porque ligó una amarilla, hizo agua en varias ocasiones y el autor del penal que acabó en la victoria venezolana.
Durante el encuentro Scaloni hizo varios cambios tácticos para ver si podían revertir el adverso marcador, pero los rivales estaban bien armados y con mucha disciplina supieron alzarse con la victoria.
Pese al cambio de futbolistas donde el Pity Martínez salió y su lugar lo ocupó el futbolista de Grêmio Porto Alegrense, Walter Kannemann, y la inclusión de Domingo Blanco y Matías Suárez, nada se pudo hacer.
Messi buscaba a Lo Celso y a Lautaro Martínez en la faz ofensiva, de manera improvisada, y eso fue lo mejor que se pudo en este pobre encuentro de la albiceleste.
@lostribuneros