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Se terminó la agonía. Le deben un regalo a sus rivales de Chelsea que les cortó la desesperación. Liverpool, por fin, se consagró campeón del fútbol inglés luego de 30 años de sinsabores; primer trofeo de Premier League.
La oncena del alemán Jürgen Klopp hizo méritos al golear 24 horas atrás al Crystal Palace. Rogaban para que Chelsea le robe un punto al Manchester City para que se acabe la agonía.
Los Blues en Stamford Bridge recibieron a su par de ‘Pep’ Guardiola en lo que se presagiaba como partidazo, ya que los locales iban por un lugar en la Champions League mientras que los segundos estaban prendidos al hilo de esperanza.
Manchester City, como de costumbre, se apoderó de la pelota y buscaba el arco rival. Sin embargo, la oncena de Frank Lampard no se amedrentaba y buscaba aprovechando huecos generados un insípido rival que extrañó al Kun Agüero.
La primera emoción sucedió en el minuto 36 gracias al estadounidense Pulisic, hombre que dejó de cama a la defensa Ciudadana. De Bruyne puso las cosas 1-1 en el décimo minuto del complemento, tras un soberbio remate de tiro libre.
Ni ahí se achicaba el conjunto Blue. Gracias Pulisic que corrió, metió, buscó y que no se conformaba con su tanto. De pronto, la defensa del City sacó una pelota increíble de gol cuando Abraham quedó solo bajo el arco para meter el gol, pero Ederson bloqueó el remate y como pudo la revoleó un defensor.
Con el mismo calco sucedió algo parecido. Otra vez la quitaron de la línea y no se podía creer la suerte del Manchester City, hasta que alertaron al árbitro que pasó algo en el área.
La salvada oportuna de Fernandinho, no fue tal, sino que el brasileño la sacó con la mano: penal y roja gracias al VAR.
Remató William, la puso en un ángulo y la gente de Liverpool lloraba de la emoción porque faltaban 11 minutos con un Chelsea que era demoledor.
2-1 ganaron los Blues y faltando siete jornadas para el cierre los Reds aseguraron su trofeo. ¡Maldición rota!
@lostribuneros
