Los «tanitos» ahora son las víctimas y andan llorando por el mundo porque Luis Suárez mordió a su pobre defensor Chiellini pero este muchacho no fue ningún nene de pecho, ya que se cansó de pegar e insultar (Foto: AFP)
Balotelli mereció la roja directa por darle un rodillazo en la cabeza al «Palito» Pereyra, pero apenas vio la amarilla. El afro-italiano se cansó de pegar y de maltratar a cuando uruguayo se le cruzó.
Vea usted señor lector, que el que terminó con 10 fue Italia, porque ellos fueron los más violentos, además, de última, si Suárez veía la roja por morder, Chiellini la merecía por darle un codazo en un pómulo.
Mucha pantomima, mucho llanto de millonario fanfarrón, que cayó ante un equipo que fue superior.
@lostribuneros