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Este jueves reiniciará la Liga de España de Primera División, tras tres meses de receso por la pandemia de coronavirus. Será oportunidad de ver nuevamente a la que es considerada la mejor de Europa y una de las del mundo. Que, conforme a la tradición del país, reina desde un siglo.
Porque el balompié, como se suele llamar al fútbol en la Madre Patria, comenzó como en tantos lugares en el cierre del siglo XIX. El 8 de marzo de 1890 un tal Colonia Inglesa Sevillana, compuesto por trabajadores ingleses, venció 2 a 0 al Recreativo de Huelva. Así nacieron campeonatos regionales hasta que en 1902 se creó el Campeonato de España, que no es la liga sino el antecesor de la afamada Copa del Rey, cuyo primer ganador fue el Club Vizcaya de Bilbao, que derrotó 2 a 1 al Barcelona.
Pero aunque fue expandiéndose el deporte, recién con el profesionalismo se disputó el primer torneo de liga en 1928, luego de luchas entre las federaciones regionales y los clubes. La primera edición largó el 10 de febrero de 1929 con 10 equipos, seis campeones de la Copa, entre ellos los gigantes Barcelona y el Real Madrid, tres subcampeones y el Racing de Santander, vencedor de un repechaje entre otros segundos coperos. Los demás finalistas fueron a la Segunda División, como el Sevilla y el Valencia, pero se establecieron ascensos y descensos con promoción incluida. Barcelona ganó su primer título sobre el Madrid en la última fecha, y su goleador José Pitus Prats marcó el primer tanto oficial al Santander el 12 de febrero para un 2 a 0 de visitante.
Al principio el dominio no se polarizó como ahora entre los dos grandes. Athletic de Bilbao, Betis, Valencia o Sevilla se metieron en el palmarés. En 1934 el torneo aumentó a 12 clubes y en 1936, se suspendió por el estallido de la guerra civil española, con el nacimiento del régimen de Francisco Franco, la que aunque terminó en 1939 dejó sus secuelas. Fueron prohibidos los nombres ingleses que designaban distintas cuestiones o de clubes, y con los años hubo dura lucha por la inclusión de extranjeros, hasta que a partir de los años 50 se permitieron pero con restricciones. Incluso, el Bilbao hizo mala campaña tras ser campeón y los mismos Real y Barsa estuvieron a punto de descender.
En 1941 la liga se agrandó a 14 clubes, en 1950 a 16 y en 1971 a 18, y desde los 50 los dos más grandes arrasaron con los títulos, salvo alguno que otro del Atlético Madrid o Valencia. Hasta que entre 1980 y 1983 los vascos rompieron la historia con dos logros de la Real Sociedad y dos del Bilbao. En 1982 se creó la Supercopa de España, con la Real como primera campeona, y en 1984 la Liga de Fútbol Profesional (LFP) tomó el control de la organización. Para la temporada 1986/87 se introdujo una ronda final al cierre de la regular, lo que se abolió a la siguiente y desde 1987 son 20 los que juegan en Primera, salvo entre 1996 y 1998.
Lo sucedido en 1995 fue una de las tantas novedades de esa agitada déccada en el fútbol español. El Sevilla y el Celta de Vigo fueron descendidos a la Segunda B (tercera división) por incorrecciones administrativas, y se invitó al Valladolid y al Albacete, de la Segunda, a ocupar sus lugares. Los perjudicados recurrieron a un amparo judicial y tras largas deliberaciones, se resolvió dejarlos en Primera y sumar a aquéllos dos nuevos, con lo que por dos ejercicios la liga contó con 22 clubes. Se descendieron luego a cuatro y se ascendieron a dos para en 1998 volver a los 20, y en 1999 se eliminaron las promociones (creadas a principios de los 90) y se agregó un ascenso más, de 2 a 3.
Eran tiempos de crecimiento enorme para el campeonato, con los ingresos por televisación privada y sistema de pago para ver que aumentaron las arcas de las instituciones. Y el estallido del «caso Bosman», por aquel futbolista belga que reclamó por una mayor apertura a los extranjeros, abrió la puerta a una gran cantidad de figuras de todos lados, con lo que nació el apodo de «la Liga de las Estrellas». Esos sí, los nativos de cada equipo iban siendo pocos, como que La Coruña alineó alguna vez con 11 no españoles; ni qué decir de Real y Barcelona, que trajeron a los más grandes talentos de Sudamérica y Europa para seguir y seguir ganando torneos locales e internacionales.
El año 2004 abrió una nueva era para la Liga por un solo nombre y apellido. El joven delantero del Barcelona B, Lionel Messi, debutó en la primera y desde allí, marcó una torrencial lluvia de goles y de glorias. Y junto a otros monstruos se llevó cuanto título hubo, doméstico y mundial. La Liga fue así la mejor de Europa, lo que continúa hoy, siendo la europea más laureada mundialmente (78 conquistas entre nueve clubes). Además comenzó a firmar patrocinios para su explotación comercial, primero con el Banco BBVA y desde 2016 con el Santander.
La actual temporada se detuvo por la llegada del Covid-19 el domingo 8 de marzo, pero reanudará este jueves nada menos que con el cclásico de Sevilla entre el local y Betis. Será el inicio de la fecha 28 de 38, en una edición que Barcelona (actual bicampeón) pelea con el Madrid, a quien aventaja por dos puntos. Los catalanes visitarán el sábado al Mallorca, en tanto los madridistas recibirán al Eibar el domingo. Sevilla, tercero algo lejos, buscará acercarse un poco a los colosos. Más allá de los números, la liga que ccomenzó como propiamente española volverá a llamar la atención del mundo. Como una reina.
Diego Martín Yamus.
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