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La venganza se sirve en plato frío. Sebastián Beccacece había sido despedido de Independiente y éste terminó cruzando la vereda para enrolarse en el rival Racing.
El «Becca» estaba en la cuerda floja porque en tres encuentros que jugó Racing su equipo, además de no cosechar resultados, no funcionaba.
Como suele suceder en el fútbol argentino, los clásicos son decisivos y su Beccacece empataba o perdía su futuro quedaba prendido con alambres y condicionado.
Todo arrancó cuesta arriba en el Cilindro porque en el minuto 39 se hizo expulsar tontamente el arquero Gabriel Arias, para peor, a los segundos de comenzada al complementaria el «Leo» Sigali también vio la roja y quedaron con nueve en la cancha.
Sin embargo, con garra y mucho oficio, y el acierto suyo de poner en la cancha a Darío Cvitanich en lugar del «Licha» López, torció la historia y el «BKCC» entró también en el libro de grandes hazañas clásicas de Racing.
@lostribuneros
