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Una victoria por la mínima se vio empañada por un grave incidente. Durante el partido de ida de los cuartos de final de la Copa do Brasil, en la Arena da Baixada, el arquero del Corinthians, Hugo Souza, fue agredido por un hincha del Athletico Paranaense que invadió el campo. El hecho, que ocurrió en los minutos de descuento, ha generado una fuerte ola de indignación y preocupación por la seguridad en el fútbol brasileño.
La crónica de un ataque inaceptable
Cuando el partido estaba por finalizar y el Corinthians se imponía 1-0, un aficionado del equipo local burló la seguridad, ingresó a la cancha y empujó a Hugo Souza por la espalda. El arquero, lejos de responder a la agresión, se alejó del atacante, mientras sus compañeros André Ramalho, Ryan y Breno Bidon intervinieron para protegerlo hasta que el personal de seguridad controló la situación. El hincha fue identificado y detenido.
La prensa brasileña condenó de forma unánime el acto, calificándolo como «ridículo» e «inaceptable». El propio Hugo Souza lamentó el suceso. «Es una actitud fea, que no puede existir. Espero que esto no quede impune», declaró, destacando que su instinto fue responder, pero se mantuvo sereno para no perjudicar a su equipo.
Consecuencias y reacciones en todo Brasil
El incidente fue registrado en el informe arbitral y podría acarrear duras sanciones para el Athletico Paranaense, que van desde una multa económica hasta la pérdida de partidos como local y juegos a puertas cerradas, según el Código Brasileño de Justicia Deportiva.
En redes sociales, la agresión desató una ola de indignación. Los aficionados condenaron la falta de seguridad en el estadio y elogiaron la compostura de Hugo Souza, quien, a pesar del difícil momento que atraviesa en su vida personal, demostró una gran entereza. Ahora, toda la atención se centra en el partido de vuelta en São Paulo, donde se espera que la tensión aumente considerablemente.
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