La Copa América 2024 comenzó con un trago amargo para todos los aficionados al fútbol. El partido inaugural entre Argentina y Canadá, disputado en el imponente Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, estuvo marcado por un punto negativo: el mal estado del campo de juego.
Un campo de juego que no estuvo a la altura:
A pesar de la majestuosidad del estadio, el césped no estuvo a la altura de las expectativas. Instalado apenas dos días antes del partido, el campo presentó irregularidades, baches y zonas con césped levantado, lo que dificultó considerablemente el desarrollo del juego.
La pelota picaba, rebotaba y hasta se frenaba en algunos sectores de la cancha. Esta situación obligó a los jugadores de ambos equipos a modificar su estilo de juego y a adaptarse a un terreno de juego que no permitía el desarrollo normal de las jugadas.
Críticas desde todos los frentes:
Las críticas por parte de los jugadores, entrenadores y aficionados no tardaron en llegar. El arquero argentino Emiliano «Dibu» Martínez fue contundente: «La cancha fue un desastre, parecía un trampolín». El defensor Cristian Romero agregó: «Las condiciones de la cancha eran muy feas. Tener que jugar esta competición en una cancha así es lamentable».
Lionel Scaloni, entrenador de la Selección Argentina, también se mostró molesto: «Hace siete meses que sabían que íbamos a jugar acá y hace dos días cambiaron el césped. La cancha es espectacular, pero el césped no está listo para estos jugadores».
Un llamado a la CONMEBOL:
Las críticas a la organización de la Copa América 2024 no se hicieron esperar. Muchos aficionados y expertos cuestionaron la decisión de jugar el partido inaugural en un campo de juego en tan mal estado. Se le exige a la CONMEBOL, como organizadora del torneo, que garantice que los campos de juego estén en óptimas condiciones para que los jugadores puedan desarrollar su potencial al máximo y que este tipo de situaciones no se repitan en el futuro.
Un debut amargo para la Copa América 2024:
Sin duda, el mal estado del campo de juego del Mercedes-Benz Stadium empañó el debut de la Copa América 2024. Un torneo que espera ser una fiesta del fútbol sudamericano, pero que comenzó con un sabor amargo para todos los involucrados.