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El Club Internacional de Porto Alegre ha tomado medidas drásticas luego de las acusaciones de acoso sexual en el último clásico Gre-Nal. En un comunicado oficial emitido el lunes por la noche, el Inter anunció el despido de un empleado, presuntamente responsable de comportamiento inapropiado mientras se desempeñaba como la mascota «Saci» durante el encuentro.
La denuncia fue presentada por una periodista el domingo después del Gre-Nal 441, donde Gisele Kümpel del Canal Monumental informó haber sido víctima de acoso por parte de la mascota del Inter. Según su relato, durante el partido en el Estadio Beira-Rio, la mascota realizó gestos inapropiados e incluso se inclinó para mirar su celular, generando una situación incómoda.
El club ha remitido las imágenes del circuito interno a la policía y ha confirmado la baja del empleado. La investigación está siendo llevada a cabo por la Comisaría 1.ª de la Mujer de Porto Alegre, mientras el empleado en cuestión será apartado de sus funciones durante el proceso.
En su declaración oficial, el Inter expresó su confianza en que los hechos serán debidamente esclarecidos por las autoridades policiales y reafirmó su compromiso con la tolerancia cero ante el acoso y la discriminación. Hasta que se resuelva el caso, el empleado permanecerá separado de la representación de la mascota Saci.
Por su parte, Grêmio también se pronunció sobre el asunto, mostrando su apoyo a la periodista denunciante y reiterando su rechazo total a cualquier forma de acoso o discriminación, tanto dentro como fuera de los estadios.
Este escándalo ha sacudido el mundo del fútbol en Brasil, subrayando la importancia de abordar de manera firme y transparente las denuncias de conducta inapropiada en el ámbito deportivo.
