Edinson Cavani, el carismático futbolista uruguayo de Boca Juniors, desató una escena conmovedora en la ciudad de Córdoba durante la concentración del equipo para el amistoso contra Talleres. La llegada de la delegación «bostera» al hotel provocó la inesperada reacción de un bebé de apenas año y medio, quien, sorprendido, exclamó «¡es Cavani!» ante la risa generalizada del público.
Lo más enternecedor ocurrió cuando una niña de aproximadamente siete años, abrumada por la emoción de ver a Cavani, comenzó a llorar. El futbolista, sensible ante el gesto, la acogió con caricias, abrazos y hasta le dedicó la firma de un autógrafo, brindándole una experiencia que seguramente atesorará como un recuerdo invaluable.
Este conmovedor episodio no solo resalta el impacto del carisma de Cavani, sino también cómo la figura del futbolista puede transcender el campo de juego, convirtiéndose en un referente positivo para los más jóvenes seguidores de Boca Juniors.