Los cafeteros fueron a colgarse adelante de su arco en el mítico Centenario de Montevideo, donde recibieron una verdadera lección de fútbol ofensivo y aguerrido, por sobretodo.
Colombia, ansioso por volver a jugar un Mundial, ya que no participa de este espectáculo desde Francia ’98, no pudo obtener ese tan mentado punto en Montevideo, que le daba el pasaje directo a Brasil 2014.
Faltan dos fechas aún y el país de Juan Valdez sueña con la clasificación directa y no se les pasa por la cabeza la idea de ir al repechaje.
Primero, juegan en casa ante Chile y que no se les ocurra perder ante la Roja, porque la cantidad de consumo de café de los habitantes del país cafetero por excelencia, puede llegar a ser superior, porque la ansiedad va a ser mayor aún.
La última chance la tendrán en Asunción, cuando enfrenten al eliminado Paraguay, el 14 de octubre.
@lostribuneros