Momentos de profundo dolor está pasando el fútbol uruguayo por estos momentos, y en especial el club Boston River que juega en la primera división de ese país. El juvenil Agustín Martínez sufrió una descompensación mientras jugaba un partido por la tercera división; fue desconectado y está en manos de Dios.
Agustín jugaba ante Cerro por el Torneo Clausura de la tercera división en el complejo de Boston River situado al norte de Montevideo, cuando pasada ya la media hora del cotejo cayó en el campo de juego «porque aparentemente le dolía la rodilla», explicaron autoridades del club al rotativo charrúa Ovación.
El móvil de emergencia tardó 15 minutos en llegar a la cancha, mientras tanto primero el kinesiólogo, luegos los árbitros y un enfermero batallaron para salvarle al vida al chiquilín aplicando RCP (Reanimación Cardiopulmonar).
La ambulancia no llevó a un nosocomio de alta complejidad cercano donde constataron que Agustín padecía un infarto. Su estado empeoró y su familia optó por desconectar los aparatos que lo sostienen de manera artificial con vida.
El medio uruguayo indica que el adolescente habría sufrido un paro «cerebral y del corazón».
En solidaridad con el juvenil y su familia el entrenador del primer equipo optó por suspender la práctica e ir junto a los futbolistas hacia el hospital donde se encuentra agonizante.
@lostribuneros