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Un hecho insólito se produjo en Brasil. Por la «Copinha», torneo Sub 20 que alberga a 128 equipos de todo el país y que se celebra en el estado de San Pablo, el conjunto de Palmeiras eliminó al modesto Galvez del norteño estado de Acre, pero ésto no quedó por esa, sino que además debió pagarle los pasajes de retorno a casa e invitarlos a cenar.
Acre es un estado que está en plena selva. Es fronterizo al oeste con Perú y al sur con Bolivia, y dista a 4 mil kilómetros de la ciudad de San Pablo.
El modesto equipo Galvez, de la capital Río Branco, pagó sus pasajes de ida y vuelta para jugar la primera ronda de la «Copa Sâo Paulo» (Copiña le llaman) y luego volverse a casa, solo que algo salió al revés, porque además de haber superado la primera fase, pasaron a la segunda, donde vencieron al Desportiva Ferroviária de Espírito Santo.
La preocupación del equipo era tremenda, porque habían comprado pasajes baratos que no permitían ser cambiados, por lo que perdieron la forma de retornar a casa, para peor, debieron recibir donaciones para poder pagar los días extras de hotel.
Antes de arrancar el juego con Palmeiras, los directivos del Galvez, pidieron por todos los medios donaciones para poder pagar el hotel, comprar comestibles para los jóvenes futbolistas y para poder retornar a casa.
El público de todo Brasil, por medio de redes sociales, comenzó a viralizar y a aportar, pero faltaba dinero para los aéreos, o al menos, volver el ómnibus -cuyo viaje tardaría unos tres días de corrido- sin embargo, luego de haber sido goleados por Palmeiras 3-0, la directiva del conjunto «Porco» dio la gran noticia: se hicieron cargo de todos los pasajes.
Además, Palmeiras, invitó a la delegación de Galvez a cenar y les donaron camisetas, balones, botines, camisetas del club, e indumentaria de entrenamiento.
@lostribuneros
