Un gol viciado de nulidad del sueco Zlatan Ibrahoimovic a favor de su equipo París Saint Germain hizo explotar a la afición del Barcelona.
El equipo catalán pudo haberse llevado el juego con victoria en pleno Parque de los Príncipes ante el París Saint Germain, pero groseros erroes del referí alemán Wolfgang Stark influyó en el resultado final del partido.
Stark, hace dos años fue reconocido por los jugadores de la Bundesliga alemana como el peor árbitro del año, y vaya si le hizo honor al «reconocimiento». Ibra tuvo que ser expulsado por un planchazo, además marcó un gol en posición adelantada.
Pese a todo, el equipo catalán hizo un buen negocio, pero lamenta que no tendrá a dos pilares fundamentales para la revancha en el Camp Nou: Messi y Mascherano.
@lostribuneros