En la previa al encuentro entre Roma y Feyenoord, por Europa League, la hinchada del equipo holandés protagonizó serios disturbios en el centro de Roma.
La hinchada del club más popular de Holanda, causo destrozos y dañó la histórica fuete de la Barcaccia, que había sido restaurada meses atrás. Los inadaptados seguidores lanzaron bengalas contra las fuerzas de choque.
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