El Mundial de Brasil 2014 va a llegar prendidito por alfileres porque las obras de los estadios no terminaron aún y los están entregando casi pegados con engrudo.
Un hincha, el pasado domingo, se puso a nadar en una tribuna del Arena das Dunas, que será utilizado para el Mundial 2014, tras una torrencial lluvia que inundó varios lugares de un estadio que tiene techadas a sus tribunas.
El Brasil de la vergüenza sigue su marcha, gastaron una millonada en la construcción de estadios que presentan fallas graves, a falta de solo 3 meses para el Mundial.
Jugaban el clásico de Rio Grande do Norte, el América ante el Alecrím en el Arena das Dunas de la ciudad de Natal, cuando tras el juego que acabó en victoria del América por 2-1, se largó una despiadada tormenta que inundó parte de las tribuna; a un hincha del equipo perdedor se le ocurrió la loca idea de tomar carrera y tirarse un piscinazo en la zona inundada y nadar un poquito, de manera burlona.
El estadio costó algo más de 150 millones de dólares, y por las redes sociales, los brasileños aprovecharon para indignarse, unos, y burlarse, otros.
La parte que pagó feo el pato fue el sector de prensa, donde los periodistas tuvieron que cubrir sus equipos para que el agua de la lluvia no los estropee.
«Una obra millonaria y la Arena no soporta una tormenta. Todos los sectores de platea estaban inundados», explotó el relator de fútbol Marcos Lopes, en Twitter.
La Arena fue inaugurada oficialmente a fines de enero, con el triunfo del local América de Natal por 2-0 sobre el Confianza del vecino estado de Ceará por la Copa del Nordeste.
@lostribuneros