Finales sin goles ante su archirrival Internacional, pero mejor puntería en los penales. Grêmio Porto Alegrense dio la vuelta olímpica en casa y suma otro palmarés a su rica historia.
Marcelo Lomba, arquero del Inter, estaba por convertirse en el héroe porque durante los 90′ le paró un tiro penal a un rival gremista y daba la sensación de que iban a hacer pata ancha en el Arena do Grêmio.
Paulo Víctor le atajó los tiros a Camilo, Cuesta y el «Nico» López, por otro lado los tricolores hicieron bien los deberes desde los doce pasos y acabaron campeones.
Título 38 para Grêmio, siete menos que los colorados.
@lostribuneros