En la tercera jornada de la Premier League, el Chelsea bajo la dirección de Mauricio Pochettino, encontró su primera victoria en una exhibición de fútbol dominante frente al recién ascendido Luton Town, que lucha por sumar puntos en su regreso a la élite del fútbol inglés. El marcador fue un contundente reflejo del desempeño en el campo, con Raheem Sterling liderando el ataque del Chelsea y marcando dos goles, uno a los 17 minutos y otro a los 68 minutos. El joven Nicolas Jackson, originario de Gambia pero nacionalizado senegalés, completó la goleada.
El Chelsea, conocido por su abultada chequera, es un equipo de estrellas cuyos sueldos superan los 200 millones de dólares anuales, en marcado contraste con el modesto Luton Town, cuyo valor total de plantilla no llega ni a los 10 millones de dólares. La diferencia económica es abismal, y mientras el Chelsea juega en el opulento Stamford Bridge con sus lujosos palcos, el Luton lucha en su estadio modesto, cuyas tribunas de madera crujen de emoción con cada gol.
Para el Luton, recién ascendido, la resistencia fue difícil ante un Chelsea hambriento de victoria para no perderle pisada a los favoritos, como el Manchester City y el Arsenal. Raheem Sterling, una vez más, se destacó y dejó su huella en el campo, cosechando ovaciones de la afición. También fue un día especial para el campeón mundial Enzo Fernández, quien tuvo su oportunidad en el terreno de juego.
Aunque el Luton Town intentó defenderse y lanzar tímidos contragolpes, no logró inquietar la sólida defensa del Chelsea. El marcador y el juego reflejaron la disparidad entre estos dos equipos, con el Chelsea en busca de brillar en la Premier League y el Luton luchando por encontrar su lugar en la competición.
