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Gamba Osaka se coronó campeón de la J-League este sábado luego de empatar sin goles con el descendido Tukushima Vortis, y que el otro candidato al título, Urawa Reds caiga de local ante Nagoya Grampus. El año pasado fue campeón de la Segunda División.
Tras la caída en picada del que fue líder y favorito durante todo el campeonato, el Urawa Reds, Gamba Osaka supo pisar el acelerador en las últimas jornadas y quedarse con su segundo título de la historia. El equipo de la Panasonic, que iba cabeza a cabeza con los «Diamantes», tuvo suerte de campeón es esta jornada 34.
Ambos equipos llegaron en igualdad de puntos pero el Gamba, presa de la ansiedad, empató ante el equipo más «fácil» del campeonato, el descendido Tukushima Vortis, que apenas ganó 3 partidos, cayó en 26 ocasiones e igualó en 5. Esta igualdad pudo haberle costado el título y que sus jugadores estuvieran al borde del «harakiri», por fortuna, su rival Urawa no se pudo levantar más emocionalmente y cayó en su casa ante un equipo que se ubica apenas por debajo de la mitad de la tabla.
Este podría ser el año perfecto para el equipo de Osaka porque su rival Cerezo cayó a la segunda división, logró, además de este trofeo, la Copa de Japón y le falta la Copa del Emperador, que la jugará ante un equipo de segunda división para quedarse con todo.
El club fue fundado en 1980 y su nombre proviene del italiano «Gamba» que quiere decir pierna, pero en japonés «gambaru» significa algo así como «dar lo mejor de uno».
Su primer título fue en 2005, y el año pasado fue el campeón de la «B», o Segunda División.
@lostribuneros
