El jugador Maximiliano Olivera, capitán del popular club charrúa no seguirá sus pasos en la institución ya que será transferido al exterior. Indignación porque le quitan una pieza fundamental y, además, no le quedará nada de dinero al carbonero.
Nada de dinero para Peñarol, club que fue utilizado como vidriera por el Grupo Casal, dueño de su pase y, prácticamente, dueño del fútbol uruguayo. La gente por redes sociales estalló de ira, especialmente, contra la directiva aurinegra, que además votó a favor de la empresa de indumentaria deportiva Puma para que siga vistiendo a Uruguay pagando cuatro veces menos que su competidora Nike.
@lostribuneros