Futbolista de Peñarol detenido por porte de arma de fuego

El atacante de Peñarol, Nicolás Schiappacasse, fue detenido por la policía de Maldonado cuando en un vehículo iba camino al Burgueño Miguel de ese departamento para presenciar el encuentro clásico entre el carbonero y Nacional por un torneo de verano.

Luego de un control estricto de seguridad debido a los casos de violencia vividos en Uruguay, donde parciales de ambos clubes fueron asesinados en una suerte de venganza absurda, los agentes de la patrulla caminera revisaron cada vehículo que se dirigía hacia el «Campus Municipal», donde fue prendido el atacante perteneciente a Peñarol, que según la institución, no tiene contrato pero sí está vinculado.

El atacante iba acompañado por tres individuos cuando le fue encontrado en su choche una pistola .9mm, con ocho balas. Esposado subió al móvil para ser puesto a las órdenes de la justicia fernandina, indicó El País de Montevideo.

De acuerdo al rotativo uruguayo Schiappacasse quedaría detenido hasta el día jueves pudiendo ser imputado. También añaden que el futbolista llevaría el arma con el fin de pasarla al interior del estadio para entregársela a otra persona, y que al verse perdido intentó ‘descartar’ la pistola. Otra causa le podría caber porque, además, le fue encontrado «una pastilla de estupefacientes», dice Ovación Digital.

Sus acompañantes eran dos mujeres de 18 y 22 años, mientras que el coche era manejado por un mayor también de 22 años, con antecedentes penales.

Este hecho complica seriamente la renovación del contrato con el popular equipo oriental, que está a la espera de lo que pronuncie la Justicia. Ignacio Ruglio, presidente del club ferroviario dijo que va a «Esperar a saber bien lo que pasó».

Nicolás Schiappacasse tiene 23 años de edad y cuenta con una experiencia en primera división pocas veces vista; si bien nació futbolísticamente en el Montevideo Wanderers, fue su rival clásico River Plate quien hizo debutar en primera cuando apenas tenía 17 años. Pasó a formar parte del Atlético de Madrid donde no logró debutar por ser extranjero menor de edad, por lo tanto anduvo en equipos juveniles hasta volver a Primera para jugar en el Rayo Majadahonda de la segunda división española. Inmediatamente fue cedido a la Serie A donde jugó en el Parma y hasta supo jugar en la liga portuguesa defendiendo los colores de rescién ascendido Familaçâo, para luego volver a Italia pero jugando en el Sassuolo.

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