El Libertadores de América era una caldera o más bien un infierno. Independiente empató ante Sarmiento por la fecha 17 de la Liga Profesional y se aleja cada vez más de los de arriba. Tras el empate de los juninenses los hinchas en las tribunas comenzaron a gritar contra la directiva de la añeja institución.
«Moyano hijo de p***, la p*** que parió», le cantaban al ritmo de la canción brasileña «Cidade Maravilhosa».
Tras cartón, un grupo de barras bravas, no más de cinco, según informaciones, irrumpieron en el vestuario para pedirles explicaciones a los futbolistas, generando un clima más tenso aún. De paso, los malvivientes de la tribuna, se llevaron algunas camisetas.
Romero había abierto para el Rojo, mientras que Gondou equilibró para Sarmiento.