Imaginen la escena, no en un campo de fútbol… ¡sino en una nevera gigante! Era la final de la Canadian Premier League 2025 en Ottawa, y el protagonista no fue solo el balón, ¡sino una auténtica tormenta de nieve!
El termómetro marcaba unos glaciales $-8°C, el campo del TD Place estaba blanco, y el viento soplaba con una furia de película. El Atlético Ottawa, ese filial del Atlético de Madrid, se enfrentaba al Cavalry FC, y desde el pitido inicial, esto dejó de ser un simple juego: fue una batalla campal contra el clima.
¿Y la parte más increíble? El partido tuvo que ser detenido varias veces, no por faltas, ¡sino para que el personal pudiera palear la nieve y encontrar las líneas del campo! Pero la imagen que te congela la sangre es la del propio portero de Ottawa, Nathan Ingham, ¡que en un momento de desesperación agarró una pala para despejar su propia área! ¡¿Un arquero paleando?! ¡Digno de un documental!
El marcador se puso feo para el Ottawa con un penal… pero entonces, apareció la magia pura. El mexicano David Rodríguez se elevó por encima de la nieve, el viento y la adversidad para marcar un gol de chilena absolutamente espectacular. ¡Una pirueta de fantasía en medio de la ventisca! Y para rematar la épica, anotó el gol de la victoria en la prórroga con una vaselina.
Las tácticas se convirtieron en pura supervivencia: toques cortos, centro de gravedad bajo para no resbalar y una resistencia física que debió ser sobrehumana. Al final, el Ottawa se coronó por primera vez, y fue el capitán, el gran Alberto Zapater, quien levantó la North Star Cup en su último partido antes de colgar las botas.
En serio, olvídense del césped verde. Esto fue fútbol en su estado más salvaje, una proeza de resistencia y talento. No fue solo una final, ¡fue una de las hazañas más épicas y recordadas en la historia del fútbol canadiense!
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