El pasado domingo dimos la triste noticia de un futbolista entrerriano que murió en plena cancha tras recibir un fortuito golpe en una incidencia normal. La autopsia dictaminó que falleció por otro motivo.
Micael Favre, de 24 años de edad, había caído desplomado y dejado de existir en la cancha tras recibir una falta de un rival, y posteriormente un manotazo de otro, tras levantarse a increpar por la infracción. Sin embargo el jugador de San Jorge de Villa Elisa falleció por una dolencia cardíaca de acuerdo al informe de la autopsia brindado por la morgue judicial de Oro Verde. Según informaciones de medios locales, la afección del jugador no era nueva.
La médica local Isabel Garay, quien lo recibió en un nosocomio de Villa Elisa, declaró que Favre «llegó sin signos de vida».
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