El delantero del Colo Colo de Chile está procesado por comprar tres televisores robados. Sin dudas de haber un premio a la estupidez: sería EL candidato.
La estupidez humana no tiene límites. El jugador colocolino Esteban Paredes cayó preso por comprarle a un narcotraficante tres televisores de 65” robados, por sólo 3.000 dólares. El atacante del popular “Cacique” gana la friolera de 400.000 dólares anuales.
Para colmo, revendió los televisores a un amigo y a su compañero de equipo, el arquero paraguayo Justo Villar, que también cayeron en la volteada.
Ahora, además de quedar en ridículo no sólo con la sociedad de su país, se “quemó” con todo el continente ya que la noticia se esparció como reguero de pólvora.
Está procesado con libertad condicional hasta que la justicia dictamine la sentencia, mientras tanto deberá comparecer, durante 90 días al tribunal.
Marcelinho
@lostribuneros