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El Pontiac Silverdome, estadio que recibió al equipo que luego venciera el Mundial de 1994, Brasil, está en estado calamitoso y sus propietarios decidieron mandarlo a remate (Foto: AP)
Los tiempos cambian, pero parece que en Estados Unidos, esto sucede a alta velocidad y no perdona; un estadio de football americano, que además de recibir la célebre final del Super Bowl, fue protagonista de partidos por el Mundial de 1994.
La selección brasileña jugó allí ante Suecia, un 28 de junio de 1994, juego que acabó 1-1, pero todo quedó como un recuerdo, y 20 años después, este magnífico escenario que costó 55 millones de dólares en 1975, año que fue inaugurado, está en estado de abandono y en su campo nacieron yuyos.
Una empresa compró el escenario deportivo para explotarlo para diversos tipos de espectáculos, más allá del football y el fútbol. Cuna de recitales de los artistas más famosos del mundo, ahora se volvió un lugar para partidos de ligas menores.
Como van a pérdida, los propietarios ya lo mandaron remate y el mejor postor podría derrumbarlo y construir un shopping o un complejo de viviendas.
@lostribuneros
