En una noche mágica en Riad, el AC Milan se coronó campeón de la Supercopa de Italia al vencer 3-2 al Inter de Milán, protagonizando una remontada épica que quedará en la memoria de los aficionados.
El encuentro comenzó cuesta arriba para los ‘rossoneri’, con el Inter adelantándose 2-0 gracias a los goles de Lautaro Martínez y Mehdi Taremi.
Sin embargo, bajo la dirección del recién nombrado entrenador Sergio Conceição, el Milan mostró una resiliencia admirable. Los ajustes tácticos, incluyendo la entrada de Rafael Leão, revitalizaron al equipo. Theo Hernández inició la remontada con un gol de tiro libre, seguido por el empate de Christian Pulisic. En los minutos de descuento, Tammy Abraham selló la victoria con un gol decisivo, desatando la euforia entre los seguidores milanistas.
Este triunfo no solo otorga al Milan su octava Supercopa de Italia, igualando a su eterno rival en el palmarés, sino que también marca un inicio prometedor para Conceição, quien ha logrado un título en apenas su segundo partido al mando.
La victoria representa un impulso anímico significativo para el equipo, que busca recuperar protagonismo en el fútbol italiano y europeo. Los aficionados ‘rossoneri’ celebran con entusiasmo este logro, confiando en que sea el preludio de una nueva era de éxitos para el club.