No daban nada por un portugués soñador que fue a hacerse la América a Brasil. La fe de Abel Ferreira en dejar su marca en el mundo del fútbol sigue dando frutos porque acaba de sumar un nuevo título a su currículum como entrenador y un nuevo trofeo para las inmensas vitrinas de Palmeiras.
El Mané Garrincha fue testigo de la Supercopa de Brasil, partido que reúne al campeón del Brasileirao, Palmeiras, y el ganador de la Copa de Brasil, Flamengo, siendo este el primer trofeo del año 2023 a nivel federal.
Sabido es que los brasileños juegan a cara de perro cada partido, especialmente las finales. La afición de ambos clubes que viajaron desde San Pablo y Río de Janeiro a la capital Brasilia se fue con los ojos llenos de goles. Los palmeirenses volverán eufóricos, mientras que los flamenguistas con la cabeza gacha, sabiendo que su equipo hizo tres goles pero que su defensa fue un verdadero fiasco.
En la cancha del Mané Garrincha se vieron siete goles en total de las cuales tres se dieron en la primera parte; Gagibol de penal antes de la media hora puso arriba al Mengo, pero en el minuto 38 Raphael Veiga reaccionó para equilibrar el marcador tras aprovechar el error de un defensor flamenguista que pretendió parar un balón de lado suyo, para sacar un zapatazo fuerte y abajo. El referí decidió adicionar tiempo antes de ir al descanso, entonces, Gabriel Menino lo aprovechó más que bien para dar vuelta el marcador.
Seis minutos iban de la complementaria cuando otra vez Gabigol anotaba tras un pase filtrado para picársela al arquero porco: 2-2 estaban. Penal para los esmeraldinos seis minutos después y Raphael Veiga le pagó de la misma forma a Gabigol, entonces los “Porcos” de nuevo subían el marcador.
Flamengo no quería perder. Los muchachos del otro portugués, Vítor Pereira fueron con todo por el empate, objetivo logrado en el minuto 61 por Pedro.
Con los gringos Gustavo Gómez, oriundo de Paraguay y el uruguayo Joaquín Piquerez, estaban en filas de Palmeiras, mientras que Flamengo puso dos uruguayos en la cancha: Georgian de Arrascaeta y Guillermo Varela, ambos equipos se daban como en la guerra.
Para no ser menos el Gabriel Menino (Gabriel el niño) apareció para marcar su segundo gol y el cuarto del encuentro que acabó en victoria por 4-3 para Palmeiras tras tomar parada en línea a la defensa del mengo, donde sus marcadores perdieron la marca y como perico por su casa mandó la pelota al fondo de las piolas.
Perlitas de esta final:
Abel Ferreira sumó su partido 185 con 106 triunfos, 45 empates y 34 derrotas. 65 por ciento de aprovechamiento de puntos; 313 goles hizo su Palmeiras, recibiendo 150 tantos.
Es campeón de la Copa de Brasil 2020, Copa Libertadores 2020 y 2021, Recopa Sudamericana 2022, Campeonato Paulista 2022, Brasileirao 2022 y ahora la Supercopa 2022. El portugués se convirtió en el primer entrenador de la historia del fútbol brasileño en lograr todos estos trofeos.