La mañana anterior a la final del Mundial contamos que el diminuto Vanuatu estaba pendiente del partido entre Argentina y Alemania, divididos entre ambas escuadras.
Vanuatu es una isla casi «perdida» en el Pacífico, perteneciente a la melanesia, pero tiene la particularidad de tener buenas actuaciones últimamente a nivel de clubes en el continente de Oceanía, ubicando a su club más popular, Amicale, en varias ocasiones en la segunda colocación de la Liga de Campeones, siempre a la sombra de los clubes de Nueva Zelanda.
Las calles de Port Vila, la capital, se vistieron con los colores teutones.
@lostribuneros