El histórico entrenador chileno debió retirarse del mundo del fútbol debido a una cruel enfermedad. Nelson Acosta descubrió a Alexis Sánchez, como técnico del Cobreloa y lanzó a la fama internacional a Claudio Bravo y Arturo Vidal. Puso a Chile en el camino de los mundiales.
Uruguayo, confieso hincha de Peñarol. Llegó a Chile como futbolista, se quedó, siguió su vida como entrenador. Se nacionalizó.
Chileno-uruguayo es Acosta. El veterano entrenador entró en la historia grande del balompié trasandino tras colocarlos en un Mundial tras una prolongadísima ausencia, y desde allí, Chile cambió su pisada.
De acuerdo al diario chileno La Tercera, el ex charrúa, nacido en la norteña ciudad de Paso de los Toros en 1944, padece del «Mal de Alzheimer». El propio diario remarca que al ser invitado a su redacción para juegos de la selección chilena, donde el oficiaba de comentarista, no tenía el mismo temperamento que lo caracterizó durante su carrera. Incluso, contaron que jugadores del Iquique notaban su extraño comportamiento, ya que Acosta olvidaba lo que decía con mucha rapidez y volvía a explicarlo.
Acosta debutó como profesional en el histórico Huracán Buceo, club que volvió al mundo del fútbol y ahora está en tercera división, para pasar al Peñarol de sus amores. Era un volante bien uruguayo, es decir, dotado de temperamento y garra. Pasó al fútbol de Chile a jugar en el Everton, luego pasó por el O’Higgins, Fernández Vial y cerró su carrera en el Lota Schwager.
Fernández Vial fue su primer equipo como entrenador en 1984, y su último equipo fue justamente, el Fernández Vial, en 2016.
Fuente: La Tercera
@lostribuneros