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Justo qué día vienen a salir campeonas las chicas de Canadá. Un 6 de agosto las jugadoras del equipo miembro de la Concacaf lograron un hecho histórico para el fútbol de aquel país justo 76 años después de que en Japón estalle la primera de los dos bombas atómicas que azotó a la isla.
Tras morir en la orilla en Londres 2012 y en Río de Janeiro 2016 donde obtuvieron la medalla de bronce, la tercera fue la vencida logrando su primer trofeo de la historia al vencer a Suecia desde el punto penal.
De las manos de Stephanie Labbe, quien atajó un penal en la definición a la escandinava Jonna Andersson, la volante de apenas 20 años de edad Julia Grosso tuvo sangre fría y calculadora para rematar frente a Hedvig Lindahl y así darle la Medalla de Oro a su escuadra.
Alegría para unas canadienses que vienen remando y decepción para las suecas que también venían por el mismo camino al perder en Río de Janeiro 2016 la final ante Alemania.
La brega terminó igualada a uno en los 90 reglamentarios producto de los goles de Stina Blacksteinius a favor de Suecia en el minuto 34, en tanto el empate llegó a los 67 a instancias del VAR luego de una falta de la defensora Amanda Ilestedt, yendo posteriormente al alargue.
Las escandinavas llegaron arrasando y con chapa de campeonas por haber batido a las campeonas del mundo Estados Unidos con goleada incluída mientras que las norteamericanas supieron vencer en zona de grupos a las estadounidenses por la mínima y a las brasileñas por un reñido 4-3.
La curiosidad de esta final es que debió ser cambiada de lugar y horario; debido a las altas temperaturas que azotan a Tokio el partido que se jugaría 11 de la mañana fue llevado a Yokohama a las 22 horas ya con 28 grados Celsius.
@lostribuneros
