Colón era sorprendido por un Independiente del Valle que estaba 2-0; minuto 55 y posibilidad de achicar el marcador por un penal sancionado por el referí brasileño Raphael Claus.
La cancha estaba pesada y las pulsaciones a mil. El arquero Jorge Pinos lo tenía bien medido al «Pulga» Rodríguez y con mucha astucia logró pararle el tiro penal que, al final, les valió el título. Colón se acordó de descontar faltando dos minutos.
Independiente acabó victorioso por 3-1. La tercera conquista llegó en tiempo de descuento cuando todo Colón estaba en el área ecuatoriana buscando tardía y desesperadamente el tanto salvador.
Merecido título de campeón de la Copa Sudamericana para los ‘Rayados’.
@lostribuneros