El Santo Padre le debe una a su Jefe. San Lorenzo salió campeón y el Papa se salió con la suya, porque no solo hizo del Ciclón a gran parte de la humanidad, sino que parece que hizo cuervo a su gran jefe: Dios.
Francisco a estas horas debe estar dando la vuelta olímpica en torno al Vaticano
@lostribuneros