Athletic Club quedó a pasitos de quedar eliminado de la Europa League, luego de caer de local por 3-2 ante el Lyon de Francia. Los vascos, dirigidos por el argentino Marcelo Bielsa, necesitan prácticamente de un milagro para clasificar.
AS.com:: El Athletic está virtualmente fuera de Europa después de una derrota ante el Lyon (2-3) fraguada por una serie de desgracias. Sólo una enorme carambola para empatar a siete puntos con el Sparta le mantendría con vida. Muniain, con un grave error en el tanto final de Lacazette, enterró una briosa reacción en la segunda mitad.
Como cabía esperar, salió decidido a por la victoria y no marcó pronto de milagro. Una internada de Muniain murió en el poste por una indecisión entre Lovren y el meta Vercoutre y, a la salida del córner que se produjo de esa acción, Herrera no hizo gol de volea de milagro.
El Lyon esperaba a la contra, con Gomis con las uñas afiladas, y se hacía fuerte en los córners. Precisamente, al tercer balón parado que remató, llegó el 0-1. Gourcuff puso una falta y Gomis, anticipándose a Iraola, remató a placer de cabeza. Lo que faltaba.
Pese a ello, el Athletic no se arredró y trató de meterse en el partido. Pero se encontró, como en Lyon, con Vercoutre, que hizo dos grandes paradas a De Marcos e Iraola, este segundo fantástico. Ni siquiera Gurpegui, con dos cabezazos, tuvo suerte. Para colmo de males, el Lyon hizo el 0-2 en el descuento de la primera mitad, Gomis atizó un disparo a Iraizoz, como es habitual el balón quedó suelto y su manopla de despeje empeoró el asunto. Se lo puso en bandeja al motivado Gourcuff para que le acribillara.
Los leones no se rindieron e hicieron lo más complicado, al igualar el encuentro en diez locos minutos tras la reanudación. Un barullo en el área, en el que los franceses pidieron falta de Amorebieta a Vercoutre, sirvió a Herrera para hacer el 1-2 en el 47 y poco después, el ex del Zaragoza provocó un penalti de Gonalons que transformó Aduriz con la misma frialdad que en Granada.
Quedaba un mundo. Pero los leones pagaron un clamoroso error de Muniain, que perdió un balón en la línea de fondo defensiva ante Fofana y éste sirvió a Lacazette para que fusilara a Iraizoz.
Fuente: AS.com
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