Los poderosos Kaizer Chiefs y Orlando Pirates se vieron las caras para jugar el «Clásico de Soweto», válido por la Carling Black Label, único partido de pretemporada considerado oficial, pero la nota central no es el encuentro en sí sino lo que sucedió en la previa; una estampida en una de las puertas de acceso al estadio Mundialista de Johannesburgo dejó como saldo dos muertos y un herido de gravedad, además de varios heridos.
Una multitud intentó ingresar de manera masiva al estadio, muchos sin su entrada, lo que ocasionó una avalancha que terminó de manera trágica, de acuerdo a informaciones provenientes de Sudáfrica.
Las autoridades de la competición lamentaron el hecho y su portavoz Michael Sum afirmó estar «tristes por las fatalidades que ocurrieron esta tarde (sábado 29)».
Kaizer Chiefs terminó venciendo por 1-0 gracias al gol de Bernard Parker y se alzaron por tercera vez consecutiva con el tradicional trofeo anual.
@lostribuneros