En un encuentro electrizante de vuelta en los 16avos de final de la Copa Sudamericana, Estudiantes sorprendió al derrotar contundentemente a Barcelona de Guayaquil por un impresionante marcador de 4-0. Con esta victoria, el equipo argentino logró avanzar a la siguiente fase del torneo.
El partido se llevó a cabo en el Estadio Jorge Luis Hirschi en La Plata, Argentina, donde los fanáticos locales presenciaron un verdadero espectáculo de fútbol. A pesar de que en el partido de ida Barcelona se había llevado la victoria por 2-1, Estudiantes no se dejó intimidar y salió decidido a darlo todo en su cancha.
El uruguayo Mauro Méndez fue el gran protagonista del encuentro al anotar dos magníficos goles a los 6 y 19 minutos, dejando claro desde el principio su calidad y talento. El joven Benjamín Rollheiser también se hizo presente en el marcador con un golazo a los 38 minutos, mientras que Guido Carrillo cerró la goleada a los 48 minutos.
El gol de Rollheiser fue una auténtica obra de arte, recibiendo el balón en el borde del área y entrando cómodamente al área del «Torero» para enganchar y disparar un remate preciso hacia el palo del arquero argentino Javier Burrai. La habilidad y precisión demostradas en esa jugada dejaron a los espectadores sin aliento.
El rendimiento destacado de Mauro Méndez también se llevó una merecida ovación, ya que además de anotar dos goles, uno de ellos fue resultado de un espectacular cabezazo que surgió de una jugada que podría considerarse una auténtica obra de arte.
Con esta victoria aplastante, Estudiantes se clasificó a los cuartos de final de la Copa Sudamericana y continúa en la lucha por el título. Por otro lado, Barcelona contó con una alineación que incluyó a media docena de jugadores extranjeros, entre ellos tres argentinos, dos uruguayos y un brasileño.