Wayne Rooney, exdelantero del Manchester United y de la selección inglesa, ha sido destituido de su cargo como entrenador del Plymouth Argyle tras una racha de nueve partidos sin ganar que dejó al equipo en el último lugar de la Championship inglesa.
Rooney asumió el mando del Plymouth en mayo de 2024 con un contrato de tres años, pero su gestión no logró revertir la situación del club, que acumuló 18 puntos en 23 partidos, situándose a cuatro puntos de la zona de salvación.
Además de los desafíos profesionales, Rooney enfrentó recientemente controversias en su vida personal. Un video viral sugería que había llevado a una mujer a su apartamento, lo que generó especulaciones sobre su comportamiento. Rooney negó estas acusaciones, afirmando que la pareja en cuestión simplemente le había dado un aventón a casa y que el video había sido editado de manera engañosa.
Esta no es la primera vez que Rooney se ve envuelto en polémicas relacionadas con su vida personal. En 2021, su esposa, Coleen Rooney, habló públicamente sobre las dificultades en su matrimonio, incluyendo infidelidades y problemas con el alcohol por parte de Wayne.
La salida de Rooney del Plymouth Argyle marca su cuarta experiencia fallida como entrenador, tras pasos poco exitosos por Derby County, D.C. United y Birmingham City. Su capacidad para dirigir equipos de élite sigue siendo objeto de debate, dado que no ha logrado consolidarse en ninguno de sus anteriores cargos.