Tribunero.com Portal futbolero
Un momento muy complicado se produjo en la primera final de la Primera C argentina, cuarta categoría de los clubes afiliados directamente a la AFA, entre San Miguel y Defensores Unidos. El marcador central Isaías Olariaga, de San Miguel, chocó su cabeza con el delantero rival Javier Velázquez a los 12 minutos del primer tiempo y sufrió hundimiento de cráneo, lo que tetuvo el partido en la cancha de Arsenal de Sarandí media hora. El árbitro Yael Falcón Pérez, de profesión guardavidas, lo asistió y luego fue trasladado en abmulancia al hospital Argerich, donde recuperó el conocimiento y se lo derivó al centro Abete, de la localidad de Pablo Nogués, en el noroeste de Buenos Aires, en el que será operado.
Fue una desgracia con suerte, como suele decirse. Pero este episodio, que no es nuevo, llama a la necesidad de cuidar a los futbolistas mucho más. Con la velocidad y la intensidad a la que se juega hoy, esto puede ocurrir con frecuencia. Debería, por ejemplo, establecerse que usen algún tipo de protección en la cabeza, que aunque se vea ridículo, salva vidas.
El encuentro terminó empatado sin goles, y el fin de semana próximo será la revancha por ver quién será el segundo que suba de la C a la B Metropolitana, junto al campeón Sacachispas.
Diego Martín Yamus.
diegoanita@hotmail.com.ar
@lostribuneros
