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El fútbol japonés tiene esas cosas. Nunca se puede considerar campeón al que domine toda la temporada porque en la recta final puede pasar cualquier cosa y al mejor estilo de una película de misterio, termina ganando el torneo el menos pensado como sucedió diez temporadas atrás, por ejemplo, cuando el quinto en todo el certamen, Nagoya Grampus, terminó siendo el campeón en la última jornada.
Ahora, a falta de nueve puntos en disputa el conjunto de Yokohama Flugels Marinos perdió para dejar entre puntos suspensivos la definición de la J-League porque de atrás y con dos goles anotados en ‘modo ráfaga’ el Kawasaki Frontale reavivó sus esperanzas.
En el Todoroki Stadium el Frontale no la estaba pasando bien porque de estar 1-0 arriba los goles de Shirasaki y el brasileños Carlinhos Juniors promediando el segundo tiempo, dejaban al Shimizu S-Pulse 1-2, resultado que dejaba casi como campeón al Marinos. Sin embargo, a falta de 15′ para el cierre Yamamura puso el alentador 2-2, y tres minutos después fue Kobayashi el que puso el celebrado 3-2 que valen tres puntos de oro.
Mientras tanto en el Nissan Stadium el puntero Yokohama Marinos la pasó mal contra Gamba Osaka que brega a brazo partido para no perder la categoría. Goles marcados en momentos clave; ni bien arrancó el encuentro Juan Alano abrió, en tanto, su compatriota brasileño Patric sobre el final lapidó.
Cinco puntos hay de distancia entre uno y otro a falta de nueve unidades en disputa; Frontale será local ante Vissel Kobe, mientras que Yokohama Marinos espera al complicado Urawa Reds Diamonds, lo que tiene sabor a final.
En la tabla de abajo los que están complicados son Gamba Osaka, con 34, estaría descendiendo junto al Shimizu S-Pulse y el ya descendido Júbilo Iwata.
