El uruguayo Luis Suárez fue prácticamente «deportado» de Brasil, tras veredicto de la FIFA. Luego del mordiscón al defensor italiano Chiellini, el «Pistolero» deberá abandonar el Brasil ya que no podrá utilizar nada que esté vinculado a la FIFA.
Suárez tiene prohibido entrar a los estados de fútbol, es decir, que no podrá siquiera ir como hincha, y mucho menos, acompañar a la delegación, ingresar a lugares que pertenezcan a la FIFA, ni realizar tareas administrativas.
@lostribuneros