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Hinchas de Nacional de Montevideo protagonizaron un hecho bochornoso tras destrozar 220 butacas del estadio Nilton Santos, tras la eliminación de la Copa Libertadores ante el Botafogo.
Según O Globo de Brasil, 11 hinchas fueron detenidos, siendo tres brasileños y ocho uruguayos. El partido, liquidado en apenas cinco minutos y con un Botafogo que había ganado en Uruguay, los hinchas del conjunto de Nacional, de manera inexplicable, comenzaron a romper partes de la tribuna del «Engenhào».
La directiva del club botafoguense anunció que los daños oscilan en los 55 mil reales, es decir, unos 17.500 dólares, dinero que los «tricolores» deberán abonar como resarcimiento, si bien la Conmebol no es clara en ese sentido.
Nacional en su país durante mucho tiempo se jactó de ser «diferente» a los demás equipos, especialmente a su rival Peñarol, y a esa campaña marketinera la llamaron «Cultura Nacional».
En el campo los jugadores uruguayos también protagonizaron otro papelón al hacerse expulsar innecesariamente e ir a provocar a los brasileños, quienes ganaron en buena ley.
«El sector era exclusivo para hinchas uruguayos, que esa esa fue la exigencia, y quedará por cuenta de la Conmebol tomar las medidas necesarias», dijo Carlos Pereira, presidente del Botafogo.
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