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El nuevo técnico del Corinthians, Cuca, fue presentado el viernes entre protestas de los aficionados fuera del CT Joaquim Grava. Durante la conferencia de prensa, habló sobre el caso de violación por el cual fue condenado en Suiza en 1987, junto a otros tres jugadores cuando jugaba en el Grêmio.
En su llegada a la conferencia de prensa, Cuca recibió la camiseta número 10 del Timão de manos del presidente Duilio Monteiro Alves. Sin embargo, de inmediato, el técnico habló sobre el tema que ha estado presente en su carrera durante años.
Cuca afirmó que quiere ayudar en causas a favor de las mujeres y que tiene vagos recuerdos del incidente. Destacó que el hecho ocurrió hace más de 30 años y que, en ese momento, tenía alrededor de 20 años y estaba en préstamo de Juventude al Grêmio.
El técnico contó que estaba en una habitación doble con otros jugadores cuando una chica subió a la habitación, pero afirmó que su participación en el caso se limitó a estar presente en la habitación. Cuca enfatizó que es totalmente inocente y que no hizo nada.
Las protestas de los aficionados del Corinthians contra la contratación de Cuca están relacionadas con el hecho de que el club se posicionó públicamente a favor de la campaña «No es No», que lucha contra el acoso y la violación, en 2021. La afición alega que la contratación del técnico va en contra de los valores defendidos por el club.
