Cruzeiro le dio la vuelta en la cara al Corinthians

Finalmente la «Raposa» hizo leña del árbol caído y en pleno San Pablo, con un Itaquera repleto, se dio el gusto de vencer al Corinthians y de alzarse con la Copa de Brasil 2018. Cruzeiro alcanza un récord en el fútbol norteño.

Como era de esperarse un tremendo partido jugaron el Corinthians y el Cruzeiro por la final de la Copa de Brasil, juego de vuelta. Los azules habían ganando por la mínima en el Mineirâo, y debían cuidar la victoria para poder alzarse con el trofeo que da una plaza para la Copa Libertadores.

Quien llegaba presionado era Corinthians, no solo por la derrota sino por lo mal que juega, por la falta de gol y por cómo le está yendo en el Brasileirâo.

Pese a todo esto, los de Jair Ventura tomaron la iniciativa y presionaron al equipo mineiro en busca del primer gol del juego. La desesperación era grande, y eso generaba espacios para un agazapado rival. El argentino Hernán «Pirata» Barcos ganó una pelota, con mucho espacio se acomodó y sacó un tremendo remate cruzado y abajo que rebotó en el palo, pero el rebote fue recogido por Robinho y a los 27′ ya estaban 1-0.

Esto apagó el fuego con nafta y el protagonismo lo tuvo el conjunto corinthians. Al minuto 55′ el VAR sancionó una insólito penal a favor de los locales. El atacante se tiró al piso, claro piscinazo, sin embargo, le indicaron al árbitro la supuesta falta. Jádson tiró y empató.

Aliviado por el gol el «Timâo» se jugó el todo por el todo para darlo vuelta. Tremendo golazo se mandó Ralf de 25 metros. La calzó como venía y se la clavó en un ángulo Fábio, pero esta vez en VAR actuó y cobró, compensando el error del penal, una falta insólita de un atacante corinthiano y el gol no valió.

Desmoralizado. Cansado. No tenía más piernas, pero sí mucho corazón el equipo local, y «foi pra frente», pero dejaron un espacio a falta de 9′ para el final, el uruguayo De Arrascaeta, que llegó sin dormir al juego porque un día atrás había jugado en Japón con Uruguay, sin embargo, el charrúa iba en tercera, puso cuarta y luego quinta a fondo, a todo vapor encaró la salida de un Cássio que mide 1,94, y se la tiró cruzada para lapidar a los locales.

Cruzeiro, con los argentinos Barcos, Romero y Cabral en la cancha, y el uruguayo De Arrascaeta, que entró en el minuto 67, dio la vuelta y tiene el récord de Copa de Brasil: seis títulos.

Jugarán la Copa Libertadores 2019.

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