ASUNCIÓN, PARAGUAY— La CONMEBOL ha dictaminado su veredicto tras los graves incidentes de violencia ocurridos en el partido de vuelta de octavos de final de la Copa Sudamericana. El organismo rector del fútbol sudamericano descalificó a Independiente por los disturbios protagonizados por sus hinchas y, como consecuencia, Universidad de Chile avanza directamente a los cuartos de final del torneo.
Un Partido Suspendido, un Castigo Severo
El encuentro, que se disputaba en Avellaneda, fue suspendido el pasado 20 de agosto debido a violentos enfrentamientos entre las aficiones, que dejaron un saldo de 19 heridos graves y 111 detenidos. Tras una investigación, la CONMEBOL decidió no reanudar el partido, optando por una sanción ejemplar.
Como resultado, ambos clubes fueron severamente castigados. A Independiente se le impuso una multa de $250,000, la prohibición de jugar siete partidos como local sin público y siete encuentros como visitante sin su hinchada. Además, el estadio del «Rojo» fue clausurado de forma indefinida para futuras competiciones de la CONMEBOL.
Por su parte, Universidad de Chile fue multada con $270,000 y también deberá cumplir la sanción de jugar sus siete próximos partidos como local sin público y los siete de visitante sin sus aficionados.
La Reacción de la «U» y el Futuro en el Torneo
Aunque celebran el avance a la siguiente fase, la directiva de la «U» ha expresado su inconformidad con la sanción económica y la prohibición de jugar con público. El presidente de Azul Azul, Michael Clark, anunció que el club apelará la medida ante la CONMEBOL, buscando revertir una sanción que consideran desmedida.
A pesar de los obstáculos, Universidad de Chile ya se prepara para su próximo desafío continental. El equipo chileno se enfrentará a Alianza Lima de Perú en los cuartos de final, con el partido de ida programado para el 18 de septiembre y la revancha para el 25 del mismo mes. La clasificación directa le da un respiro al equipo, que ahora deberá enfocarse en su objetivo de avanzar en el torneo.