Un día negro para Argentina fue convertido gracias al equipo argentino en un día memorable. Un 20 de diciembre de 2001 el pueblo salió a reclamar contra el gobierno de ese momento liderado por Fernando De la Rua, donde exigían que se les devuelvan los ahorros de toda la vida ‘saquedos’ por los bancos. Acto seguido el presidente de la nación renunciaba dejando un saldo de 30 personas que reclamaban por su dinero asesinadas en manos de la propia policía. 21 años después este triste día pasó a ser de euforia porque la Albiceleste se consgraba campeón del Mundial de Catar 2022.
Era tanta pero tanta la euforia que la Ciudad de Buenos Aires colpasó. Una multitud inimaginada se dio a la cita rumbo a la Casa Rosada donde deberían ser recibidos por el presidente de la nación Alberto Fernández. Sin embargo, fueron arriba de 5 millones de personas las salieron a las calles a ovacionar a los flamantes campeones del Mundo.
Apenas 21 kilómetros se pudo mover el ómnibus descapotable porque la cantidad impresionate de público. Dos jóvenes se lanzaron desde un puente con la intensión de caer entre los jugadores, pero su intento terminó de la peor manera; un hincha cayó al vacía y se encuentra en fuera de peligro, mientras que el otro fue rescatado a tiempo.
«No nos dejan llegar a saludar a toda la gente que estaba en el Obelisco, los mismos organismos de seguridad que nos escoltaban, no nos permiten avanzar. Mil disculpas en nombre de todos los Campeones. Una pena», escribió el Chiqui Tapia, presidente de AFA en Twitter.
Tapia aprovechó para lamentar el no poder haber llegado como tenían previsto tanto al Obelisco como la Casa Rosada porque los jugadores debieron ser llevados de nuevo a Ezeiza pero en helicópteros.
Muchos seguidores se mostraron decepcionados por no haber podido estar cerca de sus ídolos. Lo cierto es que era tanta, pero tanta gente, que superó a las fuerzas de seguridad.