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El equipo Merengue mordió el polvo en Bilbao, lugar donde el Athletic Club le metió un 1-0 que podría dejarlo sin el liderato si es que Barcelona supera al Rayo Vallecano (Foto: AFP)
Por la jornada 26 de La Liga 52.000 aficionados que colmaron el San Mamés se marcharon locos de la vida. Athletic Club venció 1-0 al Real Madrid y dejó tambaleando al equipo Merengue.
Real Madrid había arrancado con la primera situación clara del partido; Pepe ganaba de cabeza y la pelota se fue por poco. Athletic, por su lado, le tomó el pulso al rival que fallaba por el sector izquierda. Hubo un intento pero terminó con el balón afuera. Los vascos a los 26′ insistieron por la izquierda y esta vez encontraron frutos. Aruiz ganó de cabeza y dejó sin asunto al experimentado Iker Casillas.
Tras el gol, Athletic tuvo que pelear como un león en defensa de ese 1-0 ante un Madrid que estaba herido. Los Merengues le encontraron la vuelta al rival en el complemento e intentaron por arriba y con remates de media y larga distancia pero el gol no llegó.
La cerrada defensa vasca impedía que los habilidosos Benzema, Cristiano Ronaldo y Bale entren al área con el balón por el piso. El galés Gareth Bale probó sacar un espectacular remate casi desde el medio de cancha y contra la línea lateral, la pelota se estrelló en el poste horizontal y nadie pudo recoger el rebote.
Cristiano Ronaldo probó con remates de lejos y con su ardid preferido: simular un penal, solo que esta vez nadie le creyó.
Ancelotti puso en la cancha al brasileño Lucas Silva en lugar de Kross, Jesé por Illarramendi y el «Chicharito» Hernández en lugar de Benzema, pero el aguerrido equipo de Bilbao no se desarmó e incluso de contra y cerca del final malogró un tanto, dado que el balón se estrelló con el poste derecho de Casillas.
Real Madrid sufrió su quinta derrota en el campeonato y podría quedarse sin la punta si es que Barcelona en el Camp Nou vence al frágil Rallo Vallecano.
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