El equipo alemán dejó una imagen tremenda en este mundial y los indios pataxó, ni la gente de Bahía los olvidarán. Los germanos trabajaron muy bien la parte humana, mostrando que detrás de los deportistas hay personas con sentimientos y mucho respeto.
No estamos en condiciones de emitir un juicio de valores, pero si podemos decir que los alemanes demostraron ser buenos competidores, capaces de honrar su buen nombre y de dejar una linda imagen.
El festejo en torno a la Copa del Mundo fue un homenaje a un ritual aborigen, recordando su estadía por Bahía y los momentos vividos allí cercanos a una reserva india. Los alemanes optaron por integrarse, compartiendo la playa, los partidos informales con los lugareños y las calles del pueblo.
Tras el 7-1 sobre el local Brasil no hubo gastada, sino saludo de respeto, y sobre la Argentina sucedió lo mismo.
No sabemos si serán buenos tipos o no, o si lo hacen para la cámara, pero el hecho es que, por fin, alguien pone algo de buena voluntad y da una imagen digna de imitar.
@lostribuneros